Ut es hijo de uno de los cazadores mejor considerados de una tribu prehistórica que, a diferencia de sus dos hermanos, aborrece la caza y la guerra. Él busca algo más: una explicación a la violencia y una salida para evitar la crueldad. Su actitud ante la vida, su amor por los demás y su inquietud creadora lo hacen diferente y por ello, a la vez, temido y repudiado.

Los relatos mitológicos de griegos y romanos son un espejo en el cual podemos contemplarnos: nuestra avaricia puede asemejarse a la del rey Midas, quizás conocemos personas con un narcisismo que nos recuerde al de Narciso, o tal vez vivimos, o hemos vivido, un amor tan intenso como el de Eros y Psique o Apolo y Dafne.

Estos relatos recogen la crónica de la colonización de Marte por parte de una humanidad que huye de un mundo al borde de la destrucción. Los colonos llevan consigo sus deseos más íntimos, pero también sus miedos ancestrales, que se traducen en un odio a lo diferente.

Después de las vacaciones de verano, Catalina debe volver a clases. No ve a Gabriel desde el año anterior; desde que la engañó con la chica popular del curso en medio del campamento escolar. Los meses han pasado y los protagonistas han cambiado. Sin embargo, aún hay temas pendientes que deben conversar.